Soy poeta aunque no escribo.
Veo nacer el día y caer la noche.
¿ Qué más pudiere pedir ?
¡ Brota en mi pecho la alegría !

Ya sufrí, y todavía sufro.
No importa, es efímero,
Porque soy poeta aunque no escribo.
¡ Percibo en mi cuerpo vibrar el canto !

Ay si fuera escritor, cuánta felicidad,
Impregnara en eternas líneas,
Pero soy poeta aunque no escribo,
¡ El Sol lanza su brillo aún en la noche !

Tuve un amor, y lo perdí por ser poeta.
Porque adoro la libertad de sentirme infinito.
Fui triste, todavía lo soy, y lo seré.
Mas invoco en mi alma al Amor.

Aunque pongan velos en mis ojos,
Siempre contemplaré la belleza de una flor,
Pues la belleza está en la esencia de los recuerdos,
No en la efímera apariencia mundana.

Ay cómo quisiera ser un buen poeta.
Cuánta hermosura no hallo en las palabras,
Para expresar un retazo de mi algarabía.
¡ Cuántas flores y estrellas no he disfrutado !

Soy poeta aunque no escribo,
Mas arde en mi ser la pasión y el misterio.
Escribo líneas como gritos de júbilo,
¡ Cuánta vida no me alcanza para ser poeta !