TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / anedu / Más allá de la armadura

[C:374510]

Al analizar todo lo pasado y lo que nunca pasó, es inevitable pensar en los kilogramos de culpa que llevas sobre tus hombros al hacerte parte del lado sombrío de mi historia. Es imposible esquivar la sentencia que ganaste al lanzarme a la oscuridad, siendo corto el tiempo para la cronología, pero largo y tétrico el período para mis sentimientos.
Te has fugado con un negro antecedente al dejarme quemar por el frío de tu absurdo y ambiguo pensamiento; el mismo que maquinó de manera gélida la escena en la que arrancas de un tajo el abrigo que un día usaste para cubrir mi pecho.
Es interesante ver cómo al final de todo, tu brillante y célebre cerebro nunca se enteró de mi tormento; vives y me ves como si por tu "gracia" nunca hubiese perdido una hora de sueño. Soy el periodista que irónicamente trabajó para alejarte de la información.
Con la misma frialdad que caracteriza a un verdugo, te has burlado a carcajadas de los sentimientos caídos a tus pies, esos que alguna vez le pertenecieron a pobres seres condenados a acercarse a ti. Estaría mi orgullo cometiendo delito de suicidio si se atreviera a explicarte una parte de mi sufrimiento.
Como hombre pensante que soy, no pierdo mi tiempo odiándote. Como hombre de carne y espíritu, parte de mi actitud se llena de resentimiento; ese que no deja mantener mi mirada fija en tus ojos.
La pseudo-amistad sobreviviente al desastre se ve mutilada no sólo por los escombros, sino por esa voz que me grita "¡Estúpido!" cada vez que dirijo un gesto de sano compañerismo hacia ti. Huye mi buena voluntad cuando por mi mente pasea la muy subjetiva idea de que me ves como al idiota que dejaste.
Nunca supe si de mí te reíste como de los anteriores desdichados, pero mi recuerdo siempre resaltó que jamás una disculpa me pediste. Lejos de demostrar humildad ante a mí, presencié como te jactas de tu repugnante actitud frente personas dignas, a quienes por un tiempo dedicaste tus esfuerzos en darles alas, pero que tu superficial gusto las mandó al carajo; dejando la sensación de que ese era tu plan desde un principio.
Insuficientes han sido para mi corazón tus intentos de recuperar una amistad perdida en el camino; obstáculos ha interpuesto el profundo resentimiento de un amor inútil.
Es preciso llevar de manera humilde el papel que un día interpretamos en una novela; no sabemos en qué momento cambiarán los guiones. En la vida todo lo que hacemos se convierte en un "boomerang", y ha de devolverse en cualquier momento.
He salido adelante a pasos lentos y firmes, con la seguridad de haber aprendido mucho. No deseo lo mejor para ti; no te lo mereces. Espero que un buen día te arrepientas, y quizás tu inflado ego permita a tu corazón pedirme una disculpa.
Sólo cuando mi resentimiento te olvide por completo, podré mirarte a los ojos brindándote una sincera amistad. Hoy, a pesar de todo, te doy las gracias por hacerme cambiar muchas cosas en mi vida.
Aprendí que tener cara de buena gente no define el corazón de una persona. Entendí que cuando el amor llega, jamás se está demasiado ocupado; siendo válida cualquier excusa para desaparecer frente a quien no te interesa. Comprendí que los celos no son una demostración de amor; quien los siente por ti y no dedica tiempo de calidad para estar juntos, no es más que un egoísta.
Seguro estoy de la utilidad de esta experiencia; sin duda me ayudará a andar mejor por los caminos de la vida. Espero algún día entiendas la actitud de este "amigo" que te ignora y permanece ahí. Comprende que siempre podrás ver mi rostro; mirar mi corazón depende de ti.

Texto agregado el 09-10-2008, y leído por 86 visitantes. (0 votos)


Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]