¿Por qué en su debido momento
no le dimos a este cuento,
un final más lógico y feliz?
¿Por qué un amor que parecía
que nunca más se acabaría,
de pronto, se terminó en un tris?

¿Por qué no le dimos solemnidad
a aquella enorme felicidad,
que parecía embargarnos?
¿Por qué tomamos rumbos distintos
y entramos en un laberinto,
para no volver a encontrarnos?

¿Por qué le pusimos tantos peros
y obstáculos a los te quiero?
¿Por qué nos equivocamos?
¿Por qué no volvimos a sonreír
y de nuestra boca no volvió a salir,
nunca más un te amo?

¿Qué nos llevó a perdernos
y a dejar de querernos,
de esa forma tan triste?
Yo caí en un abismo
y no he vuelto a ser la misma,
desde el día en que te fuiste.

Si sé que llegaste a quererme
y que pudiste incluso verme,
como la mujer de tu vida
entonces ¿cuál es la razón,
por la que en tu corazón
la palabra amor estuvo prohibida?

Fuimos cobardes para defender
una relación hermosa, un querer,
tan grande como he visto pocos
se llena de tristeza mi recuerdo,
tú y yo aunque estábamos cuerdos
nos besábamos como locos.

Ahora parece no haber
derecho para volver,
a remediar los errores
el tiempo pasó sin cesar,
y nosotros dejamos pasar
tal vez los tiempos mejores.

Y a veces al que se equivoca
en la vida no le toca,
tener otra oportunidad
nosotros ya la tuvimos,
y juntos nunca supimos
alcanzar la felicidad.

Nosotros le cerramos la puerta
que siempre estuvo abierta,
para entrar en nuestras vidas
ahora ya no hay manera,
¡no habrá amor cuando yo quiera
ni cuando tú lo decidas!