El ultimo llamado

Esta conversación es todo lo que puedo recordar, trate de esforzar mi mente al máximo para que cada detalle de esta conversación sea claro y así ustedes puedan entender mas esa llamada, la ultima...

-¿hola?

-¡hola! Como estas, perdóname que no te pude llamar, vos saber el lió que tengo en mi casa cada ves que quiero llamar.

-si ya se, es por eso que te llame yo.

-que bueno porque quería escucharte y hablar un poco con vos.

-esta bien, hablemos un poco.

-si, te quería contar de que el viernes tengo que ir a una entrevista de trabajo y quería preguntarte si me podías acompañar.

-si, creo que el viernes no tengo nada que hacer, igual yo te mando un mensaje para avisarte si puedo ir o no.

-esta bien, igual si no podes, no hay problema, no es obligación de que me acompañes.

-no te preocupes yo voy a tratar de acompañarte.
…Espera, espera, escucha este tema en la radio, me encanta espero que te guste también

En ese momento puse el celular al parlante de la radio para que pueda escucharse bien el tema, pero al intentar hablar con ella nuevamente note que se había cortado la llamada.
Minutos después suena el teléfono en mi casa, y al atenderlo era ella nuevamente.

-se corto cuando el tema estaba por la mitad, pero igual ya lo había escuchado con anterioridad al tema, y también me gusto mucho.

-si es pegadizo y tiene buen ritmo...

De un momento a otro, siento que ella estaba en el apartamento, sentía su presencia en ese cuarto. Corte el teléfono no se porque motivo, y empecé a buscarla, estaba seguro de mi mismo de que ella estaba en algún rincón del apartamento, escondida. Busque y busque, preguntándome a mi mismo que estaba haciendo, si ella hace unos segundos me estaba hablando desde su casa. Me estaba volviendo loco, ahora yo estaba frente al gran ropero que estaba en mi cuarto, presentía que ella esta allí dentro, pero un miedo me paralizaba ante la sensación de lo que me podía encontrar del otro lado, el miedo que aun no puedo entender de por que sentía esa sensación, no entiendo por que no podía abrir esa puerta para ver que había dentro del ropero. De repente escucho un fuerte ruido afuera, como si algo se hubiera caído de gran altura, me asomo nuevamente con miedo al balcón y veo que las personas de afuera corren y gritan, y dos o tres hombres, no recuerdo bien exactamente cuantos eran, cargando un cuerpo, ¡lleno de barro! Miro asombrado y fijamente...era ella, ella estaba muerta, con un celular en su mano derecha. Recuerdo bien que gritaba su nombre hasta el cansancio y sin parar de llorar, hasta el día de hoy...