No se aún si despierto o apenas levantado, despejo el denso humo de la habitación, proveniente de una antigua salamandra, con las entrañas de mis zapatos encima secandose del agitado día de lluvia de ayer, me encuentro en una oscuridad inesperadamente destiñéndose, dos pantallazos y vuelta atrás, otra vez oscuro, ¿que pasa? le pregunto a mis zapatos. Esfuerzo ante la sorpresa, salgo, asombrado, en el horizonte el cielo dibuja unas lineas de claridad, me quedo pasmado viendo como compone la naturaleza una obra maestra de luces y sombras, es un cuadro me respondo, ellos me miran húmedos aún, me increpan, que nos dice éste, se hace el que nos tiene en cuenta, luego de hacernos arrastrar, de no mirarnos sino para meterse dentro, de no saber lo que es estar bajo él sin que le importe cual mierda pisar, si no sabe que mirda hacer, dejalo el se siente más importante estando arriba.
Igual nosotros no decimos todo ésto, ni lo pensamos siquiera, solo somos zapatos, pero ¿el que es?.
Yo solo hablo con mis zapatos, si no lo quieren entender, vaya ustedes.
Pero que lindo cielo había hoy!, no?
Zapatos:???