Cerca de un bebedero estaba el pavo real caminando de un lado a otro.
Mientras que en el gallinero, ellas cacareaban por haber dejado el huevo, y las otras gallinas se acomodaban para empollarlos y les quedaba una buena visual, para observar al pavo.
El entraba muy erguido diciendo ¿han notado mi colorido?, aleteaba orgulloso.
El gallo sacudía sus alas y las gallinas sonreían, el muy coqueto pavo hacia su retirada, y el gallo exaltado miraba a todas dentro de su harén.
El sol resplandecía, sus rayos hacia que el gato descansara debajo del nogal totalmente indiferente.
La vaca rumiaba cerca del establo sin dejar de observar a tal personaje, cuando de repente ven al cóndor volar y pararse arriba del establo, el pavo real corrió rápidamente hacia el gallinero acobardado aplastando a todas y se puso a cacarear.