Biografia novelada, inspirada en la vida de Emil Bergman.
(Resumen)


Madre: ¿Que voy a hacer ahora? Todos han partido, he quedado solo en medio del caos y la destruccion. Partido por dentro, el continuar cuesta, es pesado, solido y de aroma rancio. Se bifurca como un burdo cancer entre musculos y huesos fatigados. No, no soy un niño, he dejado de serlo. Ahora soy un hombre de trece años, he conocido la vida de la peor manera: a traves del odio y las guerras. No conozco mujer, pero la vida ha hecho de mi un hombre...

Era un sueño tambien pesado, habia comido hasta el hartazgo y se permitio mezclar carne con leche, -no estaba la familia para que vigilara sus pasos, ni el rabino, que decir del Eterno... Las manos piadosas de su madre eran enormes alas entrelazadas que se estiraban sobre su cabeza. Madre, llevame con vos, madre. El mundo es demasiado para mi, no puedo, no podre...

Despues, sintio el sacudon de un militar que lo despertaba para continuar con el trabajo forzado, quiso llorar pero se contuvo: se sentia un hombre huerfano, pero hombre al fin...

-A ver chico, ¿que te pasa?, inspeccionando la bolsa de dormir tendida sobre el piso, tienes diarrea y parece fiebre alta, has llenado el cubo de heces.
Mierda, ve y tira eso lejos de aqui, hueles a puerco. Ve ahora o te lo tirare encima, ¿me escuchas?

-Bien, lo hare...¿pero, donde? -busco un lugar mas adecuado, sin encontrarlo. Emil no estaba del todo despierto, entre la pesadilla que habia tenido, el exceso de comida y algunos pitillos de marihuana que le habian convidado, junto a la buena comida robada con la cual se dio un atracon, se sentia raro, casi feliz. Se trepo sobre una silla y lanzo el contenido de la bacinilla por una vieja ventana. Cuando una enorme voz de furia ascendia desde el patio: ¿a quien se le ocurre arrojar sus cochinadas por los aires? ¡Que el infierno lo lleve! ¡Me ha salpicado de mierda!...Era la voz de un comandante que dormitaba bajo un arbol. Se repuso de inmediato y dio orden de terminar con el maldito bastardo.Se referia a Emil, quien trataba de escaparse...

Emil decia esto y comenzo a reirse tambien, quien contagio a su entrevistador que reia de buena gana. Ambos rieron hasta que les dolio el estomago. Y encontaron en la risa un placer natural, como habian reido los que habian visto el especataculo que se presentaba: Un soldado con cara de lagartija enjabonaba harta veces la cabeza del afrentado, quien blasfemaba a diestras y siniestras. Y aullaba con voz de lobo hambriento: ¡Que encuentren de inmediato al bastardo que hizo esto y me lo fusilan de inmediato!...Todos contagiados de la risa y los militares prohibiendo reirse producia el efecto contrario, por momentos todo habia pasado, mientras las risas cruzaban el infinito contagiando al cosmos que tambien lo hacia...

Sentio que el mundo ahora sonreia, o lo hacia el, escondido en el nuevo y pequeño resguardo, desde donde tambien carcajeaba en silencio, reia su madre y le agradecia por haberlo ayudado a encontrar ese lugar. Ahora no se sentiria solo: la risa podria ser su compañera. La risa y los sueños con su madre...

Mire, dijo el entrevistador, si no se tratara de usted, pensaria que este hecho lo ha inventado, que es producto de una vision suya. De la imaginacion, pero tratandose de usted, me deja pensando...Mire, lanzar algo asi por los aires...Seria un acto de rebelion,¿no?...

-A ver, yo no intento hacer un acto critico de mis actitudes, todo estaba tan vigilado y fuera de nuestro control que el evento mas inverosimil, podria suceder. La guerra tiene mucho de eso. Se esta bajo sospecha y tratando de sobrevivir y el instinto es esa fuerza que se nos muestra desconocida y brutal...