Partieron con Discepolín
en el desgraciado año 51
Y el corazón quedó en orsai
como el alma
El bandoneón triste
buscó una explicación
en “todo el cielo” del Sur
Ese país tuyo
de poesía tanguera
y postergaciones
La inundación
en tus fangales de Pompeya
Esa niebla de la nostalgia
acaricia tu barba, Homero
Y te recuerda, te nombra
como parte esencial de la cultural popular
Y de tus sentimientos por el Globo
Un pedazo de tribuna huracanense
allá en la Quema
en tus cien pasos inmortales.

Ezequiel Groppo
19 y 21.08.07