Esteban se encontraba sentado en su solitaria y fria celda, en la cual las horas parecen dias y los segundos minutos, estaba caminando de un lado a otro, mirando a traves de los malditos barrotes que lo confinaban a ese encierro durante 3 decadas, se paseaba, a un lado su austero catre con un colchon, al otro lado el debil murmullo de las voces de sus compañeros de carcel, cual de todos mas inocente, todos argumentando según ellos su nula culpabilidad en los delitos que se les imputaban, y por los que lamentablemente tendrian que pagar con la condena de la vida encerrado, mas que en la fria celda, sintiendo claustrofobia de estar atrapados en sus propios pensamientos, los cuales eran sus unicos compañeros y los que cargaban con el peso de su conciencia.
Esteban finalmente se sentó, recordando los sucesos de hace 5 años como si hubieran ocurrido ayer ¿ Como un hombre que lo tiene todo llega a perder a su familia simplemente por su incontrolable ira?, 5 largos años durante los cuales no habia hecho otra cosa mas que cuestionarse el arrebato con el que habia dado el mismo el fin a su adorable familia.
Lo tenia grabado en su mente, y realmente, nunca lo olvidaria, estaba grabado con tinta de sangre…

Honestamente Esteban no podria haber tenido un peor día, una jornada pésima y agotadora de trabajo, que culmino con una repentina reduccion de personal dentro de la cual el se vio afectado, camino a su casa enceguecido por la ira que aun se mantenia en el choco contra un vehiculo que venia cruzando, habia sido culpa de Esteban, habia pasado con luz roja y como consecuencia tendria que pagarle 100 mil pesos al maldito imbecil que se le habia ocurrido pasar en el mismo momento que él.
Al menos esperaba en su casa poder encontrar paz, llego y su mujer lo atiende con el mismo carácter y animo de siempre, esa maldita rutina que se habia impuesto en su casa, ella le informa que la cena aun no estaba lista ( No, lo ultimo que me faltaba) en un arrebato de ira golpea con una cachetada a su mujer, no permitiría que esta estupida le terminara por arruinar el dia, la golpeo, pateo durante cinco minutos, hasta que la mujer finalmente dejó de moverse....le costó mas de 10 minutos asimilar lo que habia hecho, y entonces, la desesperación entro en el, su hija de 8 años entraba, noto lo que habia ocurrido, era una inteligente niña, vio las lagrimas surcar su rostro y ya no supo que hacer, vio a su hija correr en direccion a la calle gritando y llorando para llamar la atención de los vecinos, realmente habia cometido un error…

Hasta el dia de hoy no encontraba justificación a lo que habia hecho, lo habia arruinado todo, no podia entender lo que habia pasado por su cabeza en ese horrible momento, solo le bastaba con quedarse encerrado para siempre con su unica compañera de celda, su culpa…