Creo que he muerto
nadie me habla,
nadie me observa.
La vida se alarga
entre las penumbras de la cascada.
Vienen los diablos, malignos,
con alientos de azufre conquistado,
como si oro fuese,
con mantos y alumbras largas.
Texto agregado el 25-08-2007, y leído por 112
visitantes. (3 votos)
Lectores Opinan
28-08-2007
Conciso y logra un describir un ambiente enigmático en pocas palabras en verso. También describe la inmutabilidad del destino en la muerte. No dejas esperanzas para el narrador, muy bien. ulpiano_carpe
27-08-2007
cierto toque enigmatico que me dejo paralizada...mil estrellas varda
25-08-2007
Son ellos los muertos...Y te temen... churruka
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