TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / dissid3nt / Tú

[C:299593]

Hola,

No pensé cuanto te quería. Nunca te escribí, nunca te pensé tanto como ahora. Parece que no eras importante cuando te dejé.

Me acuerdo de la última vez que nos vimos. Yo estaba sentado frente a ti y tu no me mirabas. Como decía el chileno, parecía que los ojos se te hubieran volado. Estabas distraída, casí impávida ante mi. Yo, en cambio, sólo te veía y no podía sentir lo que pasaba. Me decía a mi mismo "¿Por qué no siento nada?" pero era la negación al sentimiento lo que ocupaba mi mente. Sabía que más tarde te iba a llegar esa inyección y que por fin ibas a estar feliz, pero no me había percatado que estando allí, ya no estabas en realidad y que simplemente era tu cuerpo vacío, sin esperanza. Poco a poco fui comprendiendo que eras el reflejo de lo que fui, de lo que te hice ser, abandonada en la soledad. El amor que se te negó ahora lograba que emanaras tu levedad. Tal vez no una levedad conciente, más si una levedad por tu condición.

También me acuerdo de la primera vez que te vi. Eras tan jóven, llena de vida que me parecía imposible que te pudiera tener por siempre. Ahí supe que eras mia y que yo iba a ser tuyo para siempre. Jugabamos tiernamente a esconderme y me encontrabas de sorpresa sonriendo. Me gritabas cosas y me llamabas intensamente. Sonreímos. Te compartí mis fracasos, mis tristezas, mis triunfos y mi vida empezó a pasar frente a ti poco a poco. Aún así, no te di la importancia que te merecías y te olvidé. Sí. Te olvidé. Pero quiero que sepas que eres la única que ha ocupado ese espacio en mi corazón aunque hubiesen cuatro antes o dos después.

Sólo te pienso ahora. Ahora que ese momento se fue. Ahora que las lágrimas inundan mi alma. Me acuerdo el día que casi te atropella un carro y te cargué hasta la casa. Nadie creía lo que yo estaba haciendo por ti, porque parecía que el amor nunca hubiese estado. Pero parece que sí. Te tomé por sorpresa mientras me veías como me invadía la angustia, como lo que sentiría un padre por su hijo, una impotencia insoportable. Creo que sí te quería, si no que no te lo hice saber y eso fue lo que te mató.

Sé que donde quiera que estes nunca vas a entender lo que te escribo. Sé que mis palabras sólo trazan un intento desesperado por encontrar mi reconciliación contigo. Sé que la única forma era retribuyendo mi sentimiento hacia a ti, porque tu condición se compone de emociones. Ahora no sale de mi mente ese momento, silencioso y parco, como tratando de ver en que se había convertido todo lo que algún día fuimos.

Ahí sentado frente a ti, sobandote la cabeza mientras mirabas lejos, pude entender que no te iba a tener más, la única incondicional, la única cuya alma acabó derrotada y aburrida, hasta que un día desistió. Ya llevabas varios días tirada en la misma esquina sin comer, sin ganas de vivir. No dabas señales de vida ni te interesaba darlas. Ahí te dejé, sin felicidad alguna y ahí me percaté que el perdon no existe y que somos la consecuencia de nuestros actos. Ahí en esa esquina, sentí un vacio inmenso que voy a recordar por siempre. Por eso te doy gracias, amiga mía. Gracias por existir, por quererme. Gracias por hacerme caer en cuenta que eres más personas que las personas mismas y que ni las personas merecen el homenaje que se te deba rendir, porque fuiste tú la única a la que no me cuestionó el amor, ni cuestioné. Gracias por ser mi winnie.

Atentamente, tu dueño, amo, señor, papá, amigo, compañero ausente...

Texto agregado el 03-07-2007, y leído por 81 visitantes. (0 votos)


Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]