El Generador de Luz nace de entre la oscuridad y el Lago de Cristal comienza un nuevo ciclo.
Los peces de colores viajan por el espacio del mismo, creando el más bello de los acuarios naturales jamás imaginados.
La naturaleza que rodea al mismo, crece entre diversos matices verdes y amarillos, con frutos de colores anaranjados y rojizos.
La Reina del Lago de Cristal, envuelta en un arco iris de gotillas, da comienzo a su poder, surgiendo del abismo.
De entre las aguas acristaladas, se elevan los Enimos, unos pequeños y angelicales seres que viven entre luz y oscuridad cómo dormidos.
Desde las lágrimas ácidas de los lánguidos árboles, emergen las flores de color violeta.
Los diminutos habitantes del Lago salen del mismo, formando anillos de cristal en la arena fina de la orilla y trepan por los árboles de lágrimas ácidas para recolectar su ración de flores violeta.
La Reina con su presencia mágica toca con sus manos las aguas del Lago, abriéndose estas al mundo real, convirtiendo los trozos de cristal en agua natural.
Deteniendo el tiempo los habitantes del bosque beben y se colman de las gotillas dulces que el Lago transforma, dejando un espacio de libertad para que flora y fauna compartan los secretos del Lago de Cristal.
Cuando el Generador de Luz comienza su puesta, La Reina se sumerge de nuevo en el abismo y el lago vuelve a ser cristalino, la noche cae y todo queda suspendido esperando el retorno de un nuevo ciclo.

Escrito por Carlos Them

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