Era ya tarde en la noche, mire las estrellas, y en medio de los afanes tuve un tiempo de descanso.

Mire por mi ventana y contemple el cielo
¡La belleza de la Creación de Dios queda más allá de la descripción!

Mientras observaba, agradecia a Dios por su bella obra. Mientras estaba sentado ahí, sentí la presencia del Señor conmigo.
Hay estaba, es maravilloso, descubri que en los detalles mas insignificantes se presenta.

Me dijo, !Siempre estoy aqui, pero no me ves, ahora te habro los ojos para que me veas, destapo tus oidos para que escuches el silvido de mi voz.
pongo en ti un espiritu de adoracion....

Me pregunto si tenia que hacer esto para poder hablar con el...

seguimos charlando, como dos personas.

Entonces, Él me preguntó, "¿Me amas?"

Que pregunta mas sincera, pero a la vez incomoda.

Yo contesté, "¡Por supuesto, Dios! ¡Tú eres mi Señor !

Entonces me preguntó
"Si estuvieras físicamente incapacitado, ¿aún me amarías?"

Me quedé sin palabras. Miré abajo.
Mis brazos, piernas y el resto de mi cuerpo y me pregunté cuántas cosas sería incapaz de hacer.

Las cosas que hoy me parecen tan sencillas. Y contesté, "Seria difícil, Señor, pero aún así te amaría"

Entonces el Señor dijo, "Si estuvieras ciego, ¿amarías aún mi creación?"

¡Cómo podría amar algo, siendo incapaz de verlo! Entonces pensé en toda esa gente ciega en el mundo entero y cuántos de ellos aún aman a Dios y a su Creación.
Así que contesté,

"Es difícil pensarlo, pero aún te amaría."

El Señor entonces me preguntó,
"Si fueses sordo, ¿oirías aún mi Palabra?"

¿Cómo podría oír algo siendo sordo? Entonces comprendí.

Escuchar la Palabra de Dios no es usar nuestros oídos, sino nuestros corazones.

Contesté, "Sería difícil, pero aún oiría tu Palabra".

El Señor entonces preguntó,

"Si estuvieses mudo, ¿Alabarías aún mi nombre?"

¡Pero cómo puedo alabar sin voz!
Entonces se me ocurrió que Dios desea que le cantemos desde nuestra alma y corazón.
No le importa cómo sonamos.
Y cuando alabamos a Dios no lo hacemos siempre con un cántico, pero cuando somos perseguidos, le damos alabanza a Dios con nuestras palabras de gratitud. Entonces contesté, "Aunque no pudiera cantarte físicamente, alabaría aún tu Nombre"

Y el Señor preguntó, "¿En realidad me amas?"

Ahi estaba por segunda vez, esa pregunta, analize mi vida, el dia de hoy, la semana que estaba pasando, y el ultimo año.

Con valor y profunda convicción, le contesté resueltamente, "¡Sí Señor! ¡Te amo por que Tú eres el Dios único y verdadero!"
Pensé que había contestado correctamente, pero Dios preguntó:

"¿Entonces por que haces lo malo delante de mi?"

Contesté,
"¡Porque soy sólo un humano,
(pero aun sabiendo que el conoce mis pensamientos, yo pensaba y me arrepentia, segui hablando) y no soy perfecto!"

"ENTONCES

¿POR QUÉ EN TIEMPOS DE PAZ TE DESCARRÍAS TAN LEJOS DE MÍ? ¿POR QUÉ SÓLO EN TIEMPOS DE ANGUSTIA ORAS SINCERAMENTE?"

No hubo respuestas. Sólo lágrimas. no queria mas.
No eran palabras ccondenatorias, eran llenas de amor, de padre amoroso, tierno y lleno de amor a su hijo.

El Señor continuó,

"¿Por qué solamente cantas en la Iglesia y en los retiros .

¿Por qué me buscas sólo en tiempos de adoración?

¿Por qué pides cosas tan egoístas? ¿Por qué pides sin tener fe?"

¿Por que solo cuando tienes necesidad, vienes a ponerte a cuientas conmigo?,

¿Por que solo en ocaciones especiales, vienes a mi?
Yo estoy en todos lados, camino contigo a tu trabajo, a tu hogar, Yo voy delante de ti.?

te vcuido, te abrazo,e stoy ahi en tus lagrimas, en las noches?

Siguio hablandome, no a mis oidos, sino a mi corazón.
Palñabras sabias, palabras que no se borraran.

Las lágrimas continuaron rodando sobre mis mejillas.

"¿Por qué te avergüenzas de mí?
¿Por qué no estas esparciendo las buenas nuevas? ¿Por qué en tiempos de persecución, lloras con otros cuando te ofrezco mi hombro para que llores? (Eso marco mi corazón)
¿Por qué pones pretextos cuando te doy la oportunidad de servir en Mi Nombre?"

Intenté contestar, pero no hubo respuesta que dar.
No salen palabras, solo lagrimas, llore y llore, hasta sollozar. no salian lagrimas.
mi coraz{on duro, lo habia quebrado en mil pedazos.
cambio a uno de carne. Gracias, tanto tiempo pidiendo que lo sanaras, que lo quebraras.
ÉL siguio...

"Eres bendecido con la vida. No te hice para que desperdiciaras este regalo. Te he bendecido con talentos para servirme, pero continúas dándome la espalda.

Te he revelado mi Palabra, pero no obtienes el conocimiento de ella. Te he hablado pero tus oídos estaban cerrados. Te he mostrado mis bendiciones, pero tus ojos nunca las vieron. Te he mandado mis siervos, pero permaneciste sentado inmóvil mientras
ellos eran rechazados. He oído tus oraciones y las he contestado todas."

"¿En verdad me amas?"

Me quebro,

tercera vez, no queria mas, solo segui llorando, ya no habian lagrimas.
No habian palabras para contestar...

¿Cómo podría hacerlo? . No tuve excusa.
¿Qué podía decir a esto? Cuando mi corazón hubo llorado y las lágrimas habían fluido, dije



"¡Por favor perdóname Señor! ¡Soy indigno de ser tu hijo!"



El Señor contestó, con su voz amorosa, tan suave y dulce

"Esa es mi Gracia, mi Hijo"

Entonces le pregunté,

"¿Entonces por qué continúas perdonándome?

¿Por qué me amas tanto?"

El Señor contestó,
"Por que tú eres mi creación.
Tú eres mi hijo.
Nunca te abandonaré.

Cuando llores, tendré compasión y lloraré contigo.

Cuando estés gozoso, me alegraré contigo.

Cuando estés deprimido, te animaré.

Cuando caigas, te levantaré.

Cuando te sientas cansado, te llevaré sobre mis hombros.

Estaré contigo hasta el fin de los días, y te amaré por siempre."

Hacia mucho que no había llorado como en ese momento. ¡Cómo pude haber sido tan frío! ¡Cómo pude lastimar a Dios con todo lo que hice! Le pregunté a Dios,

"¿Cuánto me amas?"

El Señor me estrechó en sus brazos, y contemplé sus manos cicatrizadas por los clavos. Me incliné a los pies de Cristo, mi Salvador. Y por primera vez, en verdad oré como hacia tiempo que no lo hacia.

Él me abrazo con el abrazo del Padre, solo habia silencio, el cielo ahora se alumbraba, salia el sol en mi vida, las estrellas ilulminaban mi dormitorio.
ahi estaba, el creador de todo, junto a mi.

en ese lugar, no era en ningun congreso, retiro, culto ni nada, ahi estaba en mi hogar, en mi dormitorio, conmigo, junto a mi, en su regazo.

me ofrecio su hombro, estube ahi recostado sintiendo el calor, de padre.

ya no habia mas culpa, micorazon estaba perdonado.

La comunion ha sido renovada, luego de un tiempo, jugamos, no reimos, adore su Nombre como hacia mucho, no habia tiempo no habia horario, despues de que me sentia incomodo, ahora no queria que el tiempo pasara.

volvi a abrazar a mi padre, era silencio todo, na habia nada a nuestro alrededor.

Salian palabras de su boca.

Palabras de su corazón al mio.

Mas y mas palabras a mi corazon fluian sobre mi,
palabras de bendición.