Alguien ayudeme, tengo una sobredosis
un extraño estado que domina mi ser
me sentía plena, completa
con la oportunidad de ir lejos
de volar, de ver otras realidades...

ahora, atada, sombría, triste
con un sentimiento de tristeza a cuestas,
mi cuerpo transpira
mis manos están frias.
no puedo hablar, no tengo la capacidad,
mi cabeza va a explotar...
tengo una sobredosis de este mundo,
que no me deja respirar.

me siento elevar, liviana,
siento que puedo flotar.
¿Cuando vine aquí?
todos visten de claro color
ruido... ¡ese maldito ruido,
que ni me deja pensar!
escuchenme, estoy aquí
mirenme... no soy inerte...

Creo que el efecto ha vuelto
no siento dolor...
¡maldito vivio, amado vicio!
siento la capacidad de huir
y mirar a todos desde mi hombro
soy grande, ¿por qué sufren tanto?
¡son estupidos!
sus problemas se solucionarían,
se arreglarían en mi estado.
Pero me siento grande y fuerte
con un mundo indefenso a mi al rededor
mis piernas...
mis piernas se van solas...
se que quieren ir lejos, pero...
¡esperenme malditas!
sin mi no son nada
y yo sin ustedes tampoco.
Es mi idea o se nubla la visión
que es todo esto
no lo entiendo
paren... detenganse!
tantas imágenes en mi cabeza...
no lo puedo resistir, alto!...
¿cuando comencé a dar vueltas?
las piernas... ahora se doblan
no quieren sostenerse...¡que les pasa!
no puedo mantenerme en pie...
el suelo... es calido
realemente acogedor
dónde estoy... no lo se
solo quiero seguir descubriendo...

piernas... recobraron su fuerza
ayudenme a ponerme en pie
es increible... calma plena
¡el ruido! ese estupido ruido
que hacía enardecer mi cabeza
se ha detenido!
este es el insentivo perfecto
el gran momento para seguir mi camino
por estos senderos verdaderamente desconocidos
pero a la vez totalmente hechizantes,
caminos que me impiden mirar atrás
e intentar arrepentirse, pues
la desición de seguir ya fue tomada
y es tarde para desecharla...