La muerte sintió que ya era tiempo de hacer algo diferente, de entenderse a si misma desde otra perspectiva. Se detuvo entonces, estaba frente a la casa de ella, la observó, estudió y entendió, mas no logro descifrarse a si misma.
Volvió en el tiempo, visitó a aquellos que ya la conocían, pero no, tantos libros, palabras y filósofos no servían de nada.
¡¡¡Acaso nunca sabría quien era!!! tomo la decisión. Dios y diablo quizá podrían decir quien era ella, así que fue donde don diablo, él en su mundo de odio y frustración solamente dijo:
- Tú eres la que se encarga de traerá mí los idiotitas humanoides ignorantes!! y yo... yo jajajaja disfruto ver sufrir a quienes se quedan y a quienes llegan aquí... los torturo con mi odio... los idiotas y detestables siempre tienen su esperanza - mientras hablaba en su "rostro" de macho cabrio se fijo una expresión inmunda, terrible y miedosa- de que el peor de todos los regrese a su hogar... hmmm!!! y lo mas desagradable es que... lo hace!!!

La muerte sintió creerle, pero en el fondo prefirió ir a visitar a Dios, llego, miro a San Pedro fijo...siguió caminando vio a Dios y le preguntó:
-¿Quien soy? – Dios sonrió, le abrazó, y dijo:
-Tú eres lo que piensas.