TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / Namarie / Sólo un sueño

[C:18329]

Que frío hace, siento que ni siquiera puedo mover los dedos que, duros como tablas, se niegan a seguir el instinto de arroparme. ¿Por qué está tan oscura la noche? Si más no recuerdo era de tarde la última vez que estuve con los ojos abiertos y en este momento reina tanto el negro que no podría decir si es que se me han pegado los párpados o estoy ciego, porque definitivamente no hubo noche más lóbrega que ésta ni oscuridad más desesperante. Tan pesado siento el cuerpo, tan cansado. Creo estar acostado, debo estarlo aunque los pies me duelen tal como si hubiese subido y bajado la colina de Don Pedro cien o más veces, o es que el frío me está desformando los pies. Que tranquilidad, demasiada diría yo. Apuesto cien pesos, pero que digo, cien pesos ya es demasiado poco, mil pesos a que ahora viene mi vieja y me despierta con uno de esos empujoncitos que antes, cuando las gallinas ponían huevos de oro, tildara de amor. Me complace pensar que tal vez piense que realmente me despiertan sus golpecitos, al contrario, ahí es cuando más hondo me sumerjo en el sueño y en la vigila para oírla decir – Estos viejos coño ya no sirven para nada, a ver Dios mío cuando te lo llevas y me das un descanso – o cosas por el estilo. No la culpo de sus quejas, al fin y al cabo me encuentro más atractiva a la perra que a mi vieja. Ese es el amor que nos tenemos, si señor, y cuando uno de los dos falte tenlo por seguro que se morirá el otro por no tener de quien quejarse. Tanto silencio me turba. Me estoy irritando de estar aquí inmóvil con el cuerpo hecho cera y el ruido persistente de la nada. No hay mayor perturbación que el sonido de algo que tercamente te dice, no, te reclama que está ahí y que lo escuches y lo que escucho es un hondo silencio mientras tengo ganas de bulla. El silencio no siempre es compañía. Puedo sentir una presencia a parte de la mía pero todavía no se ha manifestado. Ea, ¿quién está ahí? Sé que hay alguien. No sea tímido… Está bien, no responda y quédese como bruto vigilando un sueño que ni siquiera es suyo. Es más, siendo el sueño mío le obligaré a que se quede, así vemos juntos esta película que ni siquiera está a blanco y negro, sólo negro. Pero que lugar tan absurdo éste, me pregunto si es que estoy soñando, y más vale que así sea porque no veo razón alguna para que me castiguen encerrándome de esta forma, en mi mismo. ¿OH me habré castigado yo mismo? Si es así entonces me retracto. Es delicioso adentrarse en los confines infinitos del espíritu, más allá de toda frontera, donde el universo queda tan pequeño y el alma se expande, si, es exquisito sumergirse en el pensamiento, lo malo sería quedarse en él, ¿no amigo? Sin embargo no veo nada de malo en ser un pensamiento, aunque se coge el riesgo de o vivir eternamente hasta el cansancio (inmortalizarse) o ser el fugaz segundo de una mente ajena que podría distorsionarte hasta serte digno de una obra maestra de arte abstracto. Pobre Dios. Que triste, que triste es este lugar y que frío. Jamás quisiera permanecer en un lugar tan sórdido y tan mudo a la vez, me atrevería a decir que es peor que mi cama. Sí, ríase compañero, es más, hasta yo me río. No sé porqué presiento que me observas y eso me agobia y me enciende la sangre. No soporto que la gente se me quede mirando. ¿Qué no tiene bastante con usted mismo? Ah, se cree tan importante como para serme indiferente. Usted sí que me es indiferente… Ahora también percibo el espacio y siento que es bien estrecho, tan estrecho como una tumba. Pero ya, estoy cansado de ti y de mí, tú eres demasiado aburrido y aquí hace demasiado frío así que me despertaré. Si, así es, despertaré y terminará la comedia que estás presenciando. Cielos Santos, a veces resulta un poco difícil despertar. Me desconcentras. ¡Vete! Desaparece del sueño que contigo se me hace muy dificultosa la partida. ¡Búscate otro sueño! Hermano, le advierto que si pudiera moverme lo echo yo mismo de aquí. Vamos mujer, despiértame que ya no tengo sueño. Siento que usted se me está acercando, ya basta, demasiado. No quiero estar en este lugar, me ahogó y siento que se me está aplastando el alma. ¿Por qué no despierto? ¿Por qué no me muevo? ¿Por qué quieres que vaya hacia ti? ¿Será que esta no es mi fantasía? ¿Será por eso que no puedo mover el cuerpo? Ah caray, ya lo comprendo. Vieja allí te espero. Dios, este es tu sueño y este frío espacio, mi tumba.

Texto agregado el 26-11-2003, y leído por 258 visitantes. (2 votos)


Lectores Opinan
26-04-2005 Lento de entendimiento el finado ahhh. newen
05-01-2004 es bueno pero demasiada verborrea y peca de redundancias nibo
 
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]