Estas Leyendas fueron escritas por mis alumnos y alumnas que cursan el segundo grado de Educación Secundaria en la Escuela " Ricardo Flores Magón de Puruarán, Mich., en la materia que tengo el honor de impartir, Español.

Un señor llamado Pedro

Karla Rubí Ambríz

Don Pedro Solía jugar baraja siempre por las noches en un lugar cerca del Billar de Puruarán, Michoacán. Además le encantaba el juego del " sietito" y el dominó.
Una ocasión al salir de ese lugar encontró un perrito que iba tras él, Don Pedro no le prestó atención al animal, más de pronto miró que entre más avanzaban, más grande se hacía el canino.
Corrío hasta el río del lugar y por tal motivo dejó de beber alcohol.
Pronto se le olvidó el incidente y volvió a las andadas, pero, una noche se le apareció una joven de pelo largo, él la siguió y al alcanzarla le vio cara de caballo y pezuñas de animal.
La mujer lo abrazó y lo retachó a las puertas del Ingenio Puruarán, por tal motivo, este señor quedó un tiempo traumado.

La Muchacha fantasma
Erandy Araceli Soto Ramírez

Un día en la escuela Secundaria federal " Ricardo Flores Magón" una niña llamada " Flor" Tuvo un accidente que cambió la vida de ese lugar.
Una travesura de un compañera, hizo que la niña se cayera y se pegó en la cabeza, muriendo al instante.
Un maestro entró y la quiso auxiliar.
Tiempo después regresó Susana, la niña que hizo la travesura y pidió permiso para ir al baño. En ese lugar se lea pareció Flor, la niña muerta y le dijo te vengo a perdonar por tus maldades, pero ya no hagas más daño.
Flor salió del baño, aún con la puerta cerrada.
Desde entonces dicen que la niña " Flor" se aparece a los niños traviesos en esta escuela y les da buenos consejos.

La llorona de la Plazuela

Juana Iris Villalobos

SE comenta que una mujer muy hermosa se aparece abajo del puente cuando la gente pasa muy noche por ahí.
También que metieron a unos niños en los pilares de este río para que no se callera y que tal vez sean los niños que perdió la llorona.
Dicen que se encuentran en unos cuadritos que están en los pilares de este puente.
Las gentes que viven por ahí vive aterrada porque escucha los gritos ¡ Ay mis Hijos!