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Me prometi dedicar unas lineas a esa experiencia que me marco totalmente, y talvez para muchos de ustedes no sera la primera vez que escuchen de mi esta historia, es posible que otros que lo hagan de igual forma hayan estado conmigo en aquellos dificiles momento y puedan llamarse "sobrevivientes", algunos otros estoy seguro que mostraran incredulidad ante los hechos, no los culpo yo haria lo mismo; no pienso extenderme mucho en este escrito ya que los detalles son numerosos y bien podria escribir un extenso libro acerca de tanto las cosas que me pasaron asi como las que dejaron de pasar, el hecho de como un pequeño pueblo de no mas de 2000 habitantes llamado Totontepec Villa de Morelos cambio mi perspectiva de ver la vida.

La oferta era casi imposible de rechazar, las 480 horas de servicio social que necesitaba para graduarme en intercambio de 2 semanas de prestar servicios como misionero en un pequeño pueblo en Oaxaca, aquel estado por el cual habia viajado unas semanas antes en sus bellas playas y con una excelente compañí­a, en mis recuerdos retumbaban todavía los pensamientos de aquella innolvidable experiencia, esto me llevo a tomar una decisión de último minuto y apuntarme a aquel viaje de misionero.

Recuerdo bien que no estaba 100% seguro , le hice saber esto a mi amiga Valeria, ella me entusiasmo un poco y me dijo que un amigo de ella habí­a ido el año pasado al mismo viaje, me dio su telefono , le hable, y me dio buenas referencias, recuerdo que me dijo que la comida de las monjitas era deliciosa, incluso que el pueblo le daba cierto aire a Londres ya que siempre estaba lleno de neblina, inclusive tenían un reloj en una torre que se asemejaba al Big Ben. Creo que debí preguntarle si en alguna ocasion había estado realmente él en Londres .

Pensaba que esos camiones en los que sube gente con chivos y gallinas era una leyenda urbana, o simplemente eran cosa del siglo pasado, para mi sorpresa era demasiado real, tan real que era mi transporte hacia aquel pueblo separado de la civilización por un sinuoso camino polvoso. Me llamaba la atención los nombres de pueblos por los que pasabamos, recuerdo bien los de "Hierve el agua" y "Matagallinas" , creo que poco a poco me iba resignando , haciendome a la idea de ke esto no iba a ser nada facil.

Totontepec es un pueblo que parece que el tiempo olvido, la máxima autoridad es la iglesia, disfrazada en una alcaldí­a sumisa; por todo el lugar puedes ver parlantes colgados de postes, cuando alguien llama a una de las unicas 3 lineas de telefono que hay en el pueblo te bocean por ella:
-Daniel Chivardi , Daniel Chivardi , tiene llamada telefónica, le esperan en linea.
cuando no simplemente sirve como una gran rocola de las peores canciones en la historia de la musica en español, o de canticos católicos que inspiran al suicidio, y creanme que ese es un pensamiento fuerte cuando esa musica te levanta a las 4 de la mañana, este era un detallito mas, el dia para los totontepecanos empezaba a esta hora, ¿porque?, no tengo idea, posiblemente se fueron volviendo locos todos los habitantes poco a poco hasta que les parecio una congruente hora de comenzar el dia. No me hubiera molestado que lo hicieran, adelante , pero que afan de despertar a todo mundo, mas cuando el sueño se volvio en algo tan valioso gracias a los poco usuales compañeros de cuarto que tenía, uno de ellos veia ratas blancas en el techo, otro cacareaba como gallina por el frio de las noches, uno roncaba como oso hibernando, aunado al individuo que mencione en un escrito anterior que dormia con tenis puestos, todos estos factores hacian un nudo en mi mente que me dificultaba mas conciliar el descanso.

La comida, como dejar de mencionarla. Si algun dia tuve cierto gusto por los frijoles lo olvide gracias a estas dos semanas, caldo de frijoles, enfrijoladas, tostadas de frijoles, frijoles caldosos, frijoles secos, frijol negro , frijol cafe , frijol guero, salsa de frijol, frijol con pan, frijol con cafe, cafe con frijol, todo frijol o mejor dicho frijol con todo. Creo que pude haber sobrevivido con esta dieta de frijol sin embargo despues de una semana note que mi amigo Muziño estaba contando algo en su plato mientras movia los frijoles de un lado a otro los frijoles con su tenedor. Le pregunte y hubiese deseado jamas haberlo hecho:
-¿Que cuentas Muziño?
-¿Como que que cuento?, pues los gorgojos.
-¿Que? ,¿que chingados es un gorgojo?-inocentemente pregunte.
-Ves esos como lunarcitos que tienen los frijoles que te comes a diario.
-Si ,¿que tienen?.
-Esos son gorgojos, son insectitos , no me digas que no los habias visto.
Como explicar la repugnacion que senti en ese momento, creo que no hay palabras para hacerlo, simplemente me quede callado incredulo, vi mi plato con frijoles ,agarre uno al hazar , conte los gorgojos en el, eran cinco; ¡CINCO!, en un solo frijol, mentalmente hice cuentas, debi haber comido miles durante esta semana. No he podido volver a comer frijoles desde aquel dia. Tuve que cambiar mi dieta a cafe con pan por el resto de mi estancia.

Eso no es todo, en el pueblo a pesar de su escaso tamaño existe la ley de toque de queda, si no te encuentras en tu hogar antes de las 10 pm te meten a la carcel, eso no fue tan dificil de combatir ya que en el pueblo no hay absolutamente que hacer, lo mas productivo es el dormir, sin embargo siempre existio la duda en nosotros del porque habí­a toque de queda en un pueblo tan pequeño. Recuerdo una ocasión en la que le preguntamos al padre del pueblo del porque de esta ley, el respondió:
-La ley estaba antes de que yo llegara.
después de ello quizo cambiar totalmente el tema, por supuesto , nuestro querido padrecito nunca nos mintio, pero tampoco respondió nuestra pregunta. A la siguiente mañana nos enteramos del porque, resulta ser que este pequeño pueblecito se caracterizaba por su alto í­ndice de violaciones y asesinatos, el toque de queda fue una medida desesperada de la sumisa alcaldía para controlar a sus habitantes.

Otra cosa que nos llamo la atención fue el hecho de que la gente no conectaba los refrigeradores , en las tienditas de despensa no encontrabas un producto refrigerado, es decir tenían sus refrigeradores y congeladores, pero simplemente no estaban alimentados por electricidad, igual daba que estuvieran en una caja de carton , el descubrimiento de este hecho fue debido a un dia que estabamos desesperados Milton , Muziño y su servidor, en busqueda de alcohol, ya que el encontrarlo en este pueblo era como tratar de conseguir un puro cubano en el estado de Texas. Pues al fin en una tienda remota encontramos caguamas Sol, sin pensarlo un instante le dijimos a la señora que atendia el establecimiento que nos diera 3, las metimos en una mochila inmediatamente, nos fuimos con una sonrisa que no podiamos ocultar y una inquietud acelerada a algun escondite, me recordaba a mis momentos de pubertad en los que me escondia de igual forma. Abrimos cada quien su respectivo envase, dimos un fuerte trago para escupirlo del asco unos segundos despues, habiamos fracasado una vez mas, la cerveza parecia que la habian hecho en el sexenio de Miguel de la Madrid.

Son tantas las cosas, estoy seguro que se me escapan muchas, entre otras de las actividades poco comunes estaba el hecho de que para poder bañarte con agua caliente tení­as que cortar tu propia leña y prender una fogata en el boiler. Tenías como misionero de ir a misa diario a las 7am, eso no fue tan molesto, ya que me levantaban a las 4 y no habí­a gran cosa que hacer. Podria seguir enumerando los detalles que hacian tan peculiar a este pueblo, y espero que ustedes disfruten del sufrimiento que tuve, se bien con que lineas creen que voy a concluir. Este viaje me ayudo a valorar todo lo que tengo; pues no , la verdadera moraleja es , no aceptes impulsivamente una oferta sin conocer todos esos detallitos escondidos, puedes terminar en lo mas cercano que hay a un campo de concentración aqui en México,comiendo gorgojos, durmiendo poco ,volviendote loco, esperando el dia en que vas a salir de ese lugar.

Texto agregado el 05-10-2003, y leído por 572 visitantes. (3 votos)


Lectores Opinan
25-01-2005 ¡Ah que p&8?& !, seguramente a alguien le caíste mal y te la hizo pasar negras. He estado en Totontepec y es un pueblo sencillamente maravilloso, lleno de gente sabia y con alegría para ver la vida. ¿acaso no escuchaste su música?. Ni modo, tienes mucho que aprender mano. Adios ¡chiva! betin
05-10-2003 Tal y como si hubiese ido a misionar en medio del monte, en Santiago del Estero, en mitad de Catamarca o de Formosa, los retazos de nuestra América interior se parecen tanto!...Excelente la factura de este relato, y un final al estilo "Falcón", nuestro estupendo cuentista, rompiendo con lo previsible, y sorprendiendo al lector. Gracias por compartirlo hache
 
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