EL SALTO
Leyenda inventada como un tributo a un bello estanque que tiene color de cielo.

Las vacaciones no resultaron como hubiera deseado la familia de Sonia ya que sucedió un accidente hace algunos años en un estanque que en Tavera le llaman el “ Tanque azul” y en Puruarán le llamamos “El salto”.
A este sitio suelen ir familias a apreciar el hermoso estanque rodeado de barrancas y una agua tan azul como el cielo. En aquellas vacaciones de semana santa no fue la excepción para la familia de Sonia que año con año visitaba aquel lugar desde la ciudad de México.
Iban tan entusiasmados, llevaban comida, golosinas, cámara fotográfica y hasta juegos de mesa, en fin, parecía que pasarían un maravilloso día en aquel precioso lugar.
Llegaron, hicieron una fogata y pusieron a dorar chiles y cebollas y unos bistecs, pues al nadar, de seguro se les abriría el apetito.
Sonia fue la primera en sumergirse en las profundidades de aquel lugar y por más que intentaba llegar al fondo, no lo conseguía.
Gabriel, un primo de ella, que los acompañaba tuvo una idea y se la trasmitió a Sonia. La desafió a meterse a otro estanque que le llamamos “ El remolino” y que se encuentra junto a este tanque del “Salto”.
Sonia no sólo aceptó, sino que se trepó a lo más alto de aquellas peñas y se lanzó hacia el agua. Gabriel se quedó esperando a que su prima saliera, pero inútil fue su espera, Sonia ya no salió con vida. Tuvieron que sacarla con lazos, ya que se atoró entre unas piedras porque se dice que ese estanque tiene corriente al fondo del mismo.
Desde ese día se comenta que el espíritu de Sonia vaga por esos lugares y que una ocasión un muchcho que fue a bañarse a ese lugar ya entrada la tarde, observó una silueta que se desprendía de lo alto de aquellas peñas, al mismo tiempo que gritaba.
De miedo este joven corrió y se quedó atorado en una cerca de alambre de la cual una púa se incertó en su cuello,quedando el hombre sin habla.
Hoy, en memoria de Sonia, Willians y Uriel López Guillén, han dibujado figuras religiosas en las piedras de ese lugar con la intención de que descanse el alma de esa infortunada muchacha.