Cada vez me intereza menos
este mundo consumido
por la anarquía y devastado por las ignorancias.
Agobiando las últimas reservas,
ocultándose con las ideas
por escabrosos lugares
donde nadie osara buscar.
Ya no me intereza
el dolor de los demás
ni ser confidente
de sus alegrías y tristezas.
Casa vez será anormal
ocultar mi calma
entre las rabias
de la vida y la muerte.
Apostare por la deidad de un mundo
que no cabe vivir mas.
Cada vez costara más
hacerte el amor,
por tu falta de experiencia;
y destruiré aquel reino del perdón.
No me animo a comprender o entender
porque hay que luchar
por tanta humanidad.
Si la razón;
de un disparo desaparecerá,
sin volver a empezar
cada vez una nueva versión.