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Cuando era niño vi un hombre caminando solo por el anden de una estación, en aquel momento un arrebato de ternura se apodero de mi, imagine para el una historia de frustración y tristeza, no pude habar de ello con nadie y esa sensación se grabó a fondo en mi corazón…..
Jamás pensé que todo lo que aquel día sentí por aquel hombre lo reviviría de nuevo en esta fría madrugada de marzo, no sé donde ir, estoy preso de mis propios impulsos y me siento culpable por todo, ¡que pinto yo en esta estación de ferrocarril, persiguiendo una quimera que solo existe en mi mente enferma!
Necesito beber algo se que es muy pronto y que no debería hacerlo, pero quiero acallar las voces internas de mi conciencia.
No recuerdo como empezó todo, ni porque he terminado en este estado, hace dos días estaba en mi casa, no había sido un día especialmente duro y aunque tengo algunos problemas se puede decir que estoy acostumbrado a ellos, se que de pronto recordé
aquella niña lejana del ayer, con trenzas de oro y cuerpo de hada, yo leía su ultima carta, ya gastada por el tiempo, en ella se despedía de mi, su mano temblorosa me escribía que no soportaba la distancia, y que lo nuestro tenia que acabar, éramos dos niños, yo debería de haber seguido mi rumbo pero me quede prisionero en el puerto de su corazón, aunque se que me hacia daño siempre he retenido su recuerdo, por eso ha estado a mi lado en los malos momentos siendo como un dulce sueño inalcanzable.
De tanto amar, y de tanto llevar el corazón en la mano un día los buitres de la desolación me robaron los sueños y con ellos se fue mi cordura, ahora soy sólo un pobre loco, perdido entre la gente, que busca un rincón oscuro para que nadie le vea, pues ya nadie cree en él.

Por eso me veo aquí en busca del tiempo perdido, lo he dejado todo para perderme en la nada de mis sueños.
cuando suene la llamada del tren a Algeciras, tendré diez minutos para decidir si me pierdo en el o regreso a mi hogar, mi corazón sabe que no tengo nada que hacer allí, pero mi alma enferma desea respirar el viento del sur, dios mío, no es posible lo que estoy viendo me bombardea mi corazón, es ella, es Leticia, y que guapa esta supongo que la ley de lo imposible lo ha hecho realidad , al fin podré hablar con la razón de mi locura
- ¿Qué haces aquí amigo mío?, ¿te acuerdas de mi?, me lo esta diciendo como si hiciera solo una hora que nos hubiéramos visto, ya estoy recuperando el aliento-no se que decirte, mi corazón se ha parado-se lo digo mientras me pierdo en el azul de sus ojos -he venido a Madrid por trabajo, voy a coger el tren de Algeciras, estoy deseando llegar, pero, bueno ¡que coincidencia!, cuéntame algo de ti, ¿estás casado?, dios mío, ¿Cuánto tiempo ha pasado? ¿Veinte años?-asiento con la cabeza, algo azorado, y le cuento que mi vida ha sido muy absurda, que lo único bueno son mis dos hijos y que no hay mucho que contar, prefiero ocultarle que yo también me dirigía a Algeciras-.
-vives aquí en Madrid?-niego con la cabeza-
-al verte me he dado cuenta de que mi vida eres tu- lo he dicho sin pensar me parece que me he pasado, espero que no se ponga a la defensiva, yo quería recuperar un poco de mi juventud y mis deseos pero ahora al verla mi puzzle se ha vuelto a deshacer, - yo también me acuerdo de ti, pero no de la misma manera-
me lo ha dicho sin perder la compostura-
-no te culpo de ello-la digo-, yo sin embargo me enganche a tu recuerdo y en el camino he perdido el norte, sobre todo al darme cuenta de que mi vida no tiene sentido-seguro que ya definitivamente me creerá patético-
- pero lo nuestro casi no fue nada, creo que te lo deje bien claro, eso no quiere decir que alguna vez te haya recordado con agrado, pero nada mas que eso, todo lo que dices me desborda porque no comparto tus sentimientos, ¿Qué te parece si tomamos algo?-asiento con gusto, pero algo sorprendido por su frialdad-vamos a sentarnos aquí la contesto secamente,
-queda un cuarto de hora para que salga el tren-me advierte-la noto cada vez más distante-
-¿nunca te ha pasado el tener algo que decir que has ensayado durante años y al llegar el momento te quedas sin palabras?, me está sucediendo ahora, estoy frente a ti, eres mi sueño, y no puedo decirte todo lo que siente mi corazón-no se si esto romperá el hielo, lo que si se es que su cara es todo un poema-

-a veces la mejor forma de decir algo es no decirlo, sino dejarlo escondido en el corazón cerrado bajo mil llaves, yo también he tenido una vida y se de que estoy hablando-tiene razón, se bien lo que me dice-.
En el fondo de sus ojos estoy descubriendo que aun me ama, pero ella lucha para que no se le note, espero no resultar demasiado presuntuoso por pensar esto
- Ahora que te tengo a mi lado puedo asegurarte que no se lo que siente mi alma, estoy hablando con la chica que se cuela en mis sueños, cada noche aunque jamás te encuentro-.
-Lo siento amigo mío, yo jamás soñé contigo-.
He notado un deje de tristeza en su mirada-
-todo ha nacido en mis sueños, en ellos soy tu caballero andante, te he salvado de mil peligros pero a la hora de poder besarte tú desaparecías, entonces te llamaba a gritos y yo como un niño pequeño, buscaba las caricias de tus manos, pero eso jamás ocurría y al despertar me quedaba el sinsabor de una soledad inconsolable-espero no parecer demasiado edulcorado, odiaría que me despreciara-
-¿Cómo puedes sentir todo eso por mí?, estuvimos juntos muy pocos días y nos escribimos algunas cartas, pero no hubo más, mi mente no puede concebir algo así.
-me da igual que piense eso, ella siempre acude cuando mis recuerdos la llaman-. -Para mí siempre serás aquella niña linda que conocí un día de septiembre-me parece que una lagrima esta a punto de delatarla-.
- Pero tú tienes otra vida-me advierte devolviéndome a la realidad-
-ellos son mi realidad y volveré a ella, pero ahora prefiero soñar-se lo he dicho con convicción-
-reconozco que todo lo que me dices me hace sentir un poco halagada, es como si me contagiaras un poco de tu magia- definitivamente ha bajado la guardia, esta resucitando la niña de quince años que aun lleva dentro-
-esa magia casi acaba conmigo hace algunos años-le contesto con sinceridad- me volví loco y no fue de amor, no quise aceptar que la vida era algo sencillo, quise vivir en un mundo ideal, donde podía reinar a gusto, allí incluso me podía olvidar de ti, pero un día desperté a la cordura y tuve que aceptar que todo lo que me había echo feliz era una absurda mentira de mi enferma imaginación-mientras la hablo sus pupilas me sonríen-
-y lo de ahora que es ¿real ó imaginario?- creo me esta examinando-
- este es un deseo cumplido-le contesto un poco a la defensiva-, quizás deba empezar de nuevo, aún así no se si
a partir de ahora estaré a la altura de mis sueños-
-¿Qué vas a hacer con tu vida?-porque me hará esta pregunta?, he de bajar de la nube, ella no es mía
-en éste momento no lo sé, me siento sólo-la contesto algo triste-
-lo mejor es que vuelvas con los tuyos-.La niña ha vuelto ha esconderse, me ha hablado la mujer sensata-.
-este instante no va a ser eterno, he cambiado de destino, volveré al norte, cuando tú te vayas sabré que hacer-mientras le digo esto ha sonado el aviso del tren de Algeciras, esta vez la he perdido para siempre-.

-ese es mi tren, he de irme, vuelve con los tuyos, olvida la soledad, es mala, sólo te hará llorar-la he dicho que la acompaño al anden, estoy observándola, los rayos de sol dibujan su perfil, el bello atardecer añade aun mas tristeza a la estampa, al cogerla una maleta mi mano rozo la suya y me asomo una lagrima, espero que no lo haya notado, ahora solo quiero disfrutar este momento, es el primer sueño en el que he podido hablarla y tocarla, ya estoy frente a su tren, la maquina poderosa me va a robar los sueños-
-has cambiado poco, aun conservas ese brillo ilusionado en tus ojos-me dice mientras vuelven a avisar su tren-
-tienes que irte, me han quedado demasiadas cosas por decirte!, jamás dejare de quererte aunque seas un ideal, y mi corazón te sienta lejana, sólo quiero pedirte un favor, cuando te encuentre en un sueño, no te escondas, déjate ver por favor-se lo he dicho llorando-
-lo haré, pero vuelve a casa por favor, seguro que te esperan con cariño, porque eres un hombre bueno-
-me lo ha dicho con amor, ella me quiere pero la vida nos ha dicho que no-
-cuando te vayas ya no me sentiré tan solo, he respirado tu aroma y he contemplado tus ojos, has dejado de ser solo una ilusión, a partir de ahora serás algo mas que eso, una amiga de mi alma a que tendré a mi lado cada vez que cierre mis ojos-
-ella se va, no nos hemos tocado, solo nos miramos, mientras el tren parte, mi corazón encogido me ahoga la garganta,-.
Otra vez estoy solo, pero mi tren también sale ya, tenia dos billetes pero ya no me queda elección, mientras corro hacia mi tren intento asimilar todo lo que me ha sucedido, pero mi mente esta abotargada, como siempre el cielo ha vuelto a jugar con mis emociones, solo somos dos trenes que se cruzan, mientras uno se dirige al norte el otro vuela hacia el sur.






Texto agregado el 07-06-2005, y leído por 250 visitantes. (0 votos)


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